El
calendario chino, a diferencia del nuestro, se rige por el calendario lunar,
por lo que el 10 de febrero fue el primer día del nuevo año chino. La verdad
que intentando informarme un poco sobre el tema me he visto superado y es más
complejo de lo que pensaba en un primer momento. Por tanto no me meteré en
muchos berenjenales y me limitaré a contar lo básico y cómo se vive el año
nuevo en China.
Como
decía, el 10 de febrero fue el primer día del año. En China, el año siempre
empieza en la segunda luna nueva tras el solsticio de invierno (del hemisferio
norte). Esto en la práctica supone que el año nuevo chino cae entre finales de
enero y primeros 20 días de febrero.
En
teoría, China acaba de entrar en el año 4711. Sin embargo, esta es una cuestión
más histórica y anecdótica que otra cosa. A todos los niveles, estamos en 2013
desde el 1 de enero, y muchas personas ni siquiera conocen la existencia de esta “contabilidad B” que
empezó, dicen, tras la coronación del emperador Amarillo, Huangdi, hace casi
5000 años.
Lo
que sí es importante en China, es que entramos en el año de la serpiente. Cada
año corresponde a un animal, en un ciclo de 12 años que corresponde a 12
animales. Cada animal tiene un carácter y personalidad diferentes, lo que influirá
en cierta manera en lo que pase en ese año. El animal influye también sobre las
personas, de hecho cuando alguien te pregunta por tu edad, es normal que
rápidamente haga cálculos a ver qué animal te corresponde según tu año de
nacimiento.
Y ya
dejando la teoría de lado, que es algo que se puede consultar en cualquier
libro, la manera en la que China celebra el año nuevo es bastante peculiar. Se
trata de la celebración más importante para ellos y es el único momento del año
en que muchas empresas cierran durante varios días consecutivos. Las ciudades se vacían completamente y los
chinos se van a sus pueblos de origen, que son los que recobran vida en estas
fechas. El año nuevo chino, o la Fiesta de la Primavera, que es como la llaman
aquí también, es una época para pasar en familia. O por lo menos había sido así
hasta ahora. Cada vez más, las familias aprovechan para pasar también unos días
de vacaciones haciendo turismo.
Esto
lo pudimos comprobar en Yangshuo, un pueblo turístico del sur de China en la
provincia de Guanxi al que fuimos durante las vacaciones de año nuevo. El día 9, y en menor medida el 10, el pueblo
estaba casi desierto. El día 9 fue el equivalente a la Nochevieja occidental,
el día en que las familias se reúnen y se pegan esas típicas cenas interminables
(en las que uno de los platos principales son los jiaozis). A partir del 10, muchas personas aprovechan para hacer
turismo en familia, por lo que el pueblito en el que estábamos de repente se
quedó pequeño para tanta gente.
Ya
de vuelta a Pekín, pudimos comprobar que en las ciudades efectivamente no se
queda nadie: no hay tráfico, cero problemas para coger un taxi, la
contaminación ha llegado a estar incluso en niveles saludables, etc. Una
maravilla, ya podría ser todo el año así.
Pekín vacío
Entre
las costumbres durante estas fechas la que más llama la atención es la manía o
tradición, llámenlo como quieran, de tirar petardos y tracas en cada esquina y
en cada calle. Aunque no hay momento fijado para esta práctica, lo cierto es
que a partir de las seis de la tarde se intensifica y dar un paseo se convierte
más bien en una prueba de supervivencia. Muchas veces la traca se produce en
medio de la calle, por lo que los escasos coches que circulan estos días tienen
que parar y esperar a que termina el festival de ruido.
Otra
de las costumbres es adornar todo de color rojo, especialmente, y esto no falla
en ninguna casa, la puerta principal. Así, a los lados se ponen unas tiras
rojas con imágenes de los dioses de las puertas, que son los encargados de
cuidar del hogar.
Calle en Yangshuo
Yangshuo
Restos de la fiesta del día 9
Tanto
esta, como la costumbre de los petardos, tienen un origen común. Según una
creencia china, a finales de cada año venía una criatura que destruía todo y
descubrieron que la única forma de ahuyentarlo era con el color rojo y con
ruido.
Una
de las costumbres que sí se asemeja a las nuestras es la de hacer regalos en
estas fechas. Niño y mayores suelen recibir sobres rojos con dinero dentro. Aparte
de esto, también es típico hacerse regalos de otro tipo, por ejemplo cajas bien
presentadas para la ocasión con alimentos dentro. En este sentido, son comunes las cajas con
licores u otros alcoholes, pero también te puedes encontrar cajas con botellas
de aceite de oliva o casi cualquier cosa que se te pueda ocurrir. Hay que
destacar que en China la reputación y las apariencias son muy importantes, así
que los regalos juegan un papel clave en este aspecto, no solo ya con familiares
o amigos sino también en los negocios.
Sección regalos de año nuevo chino